El alcoholismo es una enfermedad que afecta a miles de personas en todo el mundo. Desgraciadamente, este problema no sólo afecta a quienes consumen alcohol, sino también a todos aquellos que están cerca de ellos, familiares, amigos, incluso compañeros de trabajo.

Las consecuencias en la vida de quien desarrolla una dependencia química son siempre las peores. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alcohol es responsable de cerca de 3 millones de muertes en todo el mundo. A pesar de ser clasificada como una enfermedad por los médicos, los espiritistas afirman que quien sufre un consumo excesivo de alcohol es más susceptible de atraer espíritusobsesores.

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¿Qué dice el espiritismo sobre el alcoholismo?

Para los espiritistas, cuando estamos en el plano espiritual somos las mismas personas que éramos cuando encarnamos, es decir, espirituales o carnales, mantenemos los mismos gustos, las mismas actitudes.

Según los espiritistas, hay unos cuatro espíritus por cada individuo encarnado, y como somos iguales, ya sea en el plano espiritual o en el terrestre, la obsesión por el consumo de alcohol es la misma en ambos planos.

La diferencia es que al encarnar toma una forma física y es capaz de alimentarse/ingestar el propio alcohol. Mientras que en forma de espíritu no sería capaz de entrar en un bar y pedir una dosis, por ejemplo. Y como consecuencia, el espíritu obsesionado se acerca al encarnado que también sufre de alcohol y comienza una especie de vampirización. Es como si chupara los fluidos del alcoholtener la misma sensación que cuando estás encarnado.

¿Es curable el alcoholismo?

No podemos decir que exista una cura como tal, porque quienes son químicamente dependientes lo serán de por vida. Pero hay tratamientos que pasan por periodos de desintoxicación. Luego será una lucha diaria pasar por delante de los bares y no detenerse en ellos.

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¿Qué hacer para dejar de beber?

Tanto los espiritistas como los médicos aconsejan casi el mismo tratamiento. El primer paso es reconocer el problema con el alcohol y, a continuación, buscar ayuda médica. Los médicos le harán algunas preguntas que quizá le parezcan irrelevantes, pero lo cierto es que son primordiales para comprender el grado de dependencia.

Tras la evaluación, comenzará el periodo de desintoxicación, es decir, el cuerpo que estaba acostumbrado al alcohol y a sus efectos tendrá que volver a aprender a vivir sin él. Este periodo es el más difícil, ya que las crisis de abstinencia (la falta de contacto con la sustancia) suelen ser severas, y requerirán de mucha fortaleza física y mental, por lo que el tratamiento debe estar estrechamente vigilado por médicos, psicólogos ypsiquiatras.

Después de esta fase, es muy recomendable asistir a las sesiones del grupo de Alcohólicos Anónimos (AA). Así, el adicto tendrá contacto con otras personas que comparten la misma enfermedad y verá que no está solo en este viaje.

"El Espiritismo libera las conciencias de las sombras y las llama a las escaladas desafiantes del progreso"

Manoel Philomeno de Miranda

Tratamiento espiritista para dejar de beber

Además de la fase médica y psiquiátrica, los espiritistas también aconsejan acudir a una terapia espiritual. Pero no sólo el alcohólico, sino toda su familia, para que juntos recen por el espíritu obsesivo que le rodea.

El "Pase" o "Pase Magnético" es una de las prácticas más utilizadas por ellos, pues acaban transmitiendo los "buenos fluidos" adquiridos en el tratamiento para el individuo que padece la enfermedad y el posible espíritu obsesor, haciendo que ambos encuentren el camino para librarse de la adicción.

Otra práctica es la "Orientación de los espíritus", que en un solo trabajo, en el que los espíritus socios del alcohol se dan cuenta del estado en que se encuentran y se les invita a reformarse. En una sola sesión, es posible atender a unos cuatro o cinco espíritus obsesivos.

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